jueves, 24 de mayo de 2007

De la impunidad del conductor

Esta mañana he bajado del metro en Las Tablas. Justo al lado de la estación ( ya hablaré otro día de los problemas de esta ampliación ) hay un paso de cebra con semáforo. A esas horas, hay muchos más coches que peatones. Un grupo de unas seis o siete personas lo cruzaba unos diez metros por delante de mí. Pues bien, aunque el semáforo estaba en verde, una vez cruzaron estas personas que me precedían, los coches empezaron a pasar. Y ahí empiezo a cruzarlo, jugándome el tipo ¡¡¡ en un paso de cebra con un semáforo en verde !!! En definitiva, a mitad del cruce, un coche ha pegado un frenazo para no atropellarme ( que detalle ) y el simpático conductor me ha ofrecido una hermosa serenata de pito en re menor. Y al mirarle yo y señalarle al muñeco verde, el tío me ha hecho ese típico gesto despectivo con el brazo que se traduce por "que te pires, pringao". Como el muñeco empezaba parpadear he cruzado, para no perder la razón y, sobre todo, para mantener mi integridad física.

Lo mejor de todo es que, leyendo esto, os sonara a algo sabido o ya vivido. El coche manda, el peatón se adapta. Y sí, sé que sois conductores y que vais a empezar con lo de "es que hay peatones acarajotados", "es que los peatones también haceis lo que os sale de los huevos". Pero no era ese mi caso, por lo menos no lo era esta mañana. Y me he sentido ante tamaña injusticia, como decía el tango "y le juro todavía/ no consigo comprenderme/como pude contenerme / y ay no más no la maté".

Menos mal que en este país al menos no se vende armas de fuego, porque me han entrado unas ganas de cometer un homicido plenamente justificado..

3 comentarios:

Miguel Ángel dijo...

Me ha gustado lo de la serenata de pito en re menor.
Estoy de acuerdo contigo, aún siendo conductor.
Tampoco tolero a los conductores que aparcan en cualquier sitio: encima de las aceras, en tercera fila, en las rotondas, en los pasos de cebra. Me parece una falta total de educación. Y me indigno cuando tengo que dar tropecientas vueltas para encontrar aparcamiento y pienso: "seré yo el gilipollas".

txema dijo...

Juan, aunque sea conductor, lo que e e, y lo que no, no e.
Ya sabes además como me sienta de bien eso de parar donde cada uno quiera, poner la doble intermitencia (algo muy almeriense), y bajarte a hacer el mandado. Y si encima le pitas, pues te mandan al carajo.
Una anécdota, esta Navidad, iba con Neftalí en su coche, y una señora parada en doble fila estaba montando un tinglado del copón...Neftalí al pasar junto a su coche bajó la ventanilla y le dijo: "Señora usted es insociable".
Bueno la energúmena montó un concierto de pito e improperios que no os podeis imaginar. Pues eso, le cabreó que encima de no tener razón le dijeran insociable, en lugar de "quita del medio gilipollas" o "vete a tomar por culo" o...

Sergio Cortés dijo...

Yo, como es conocido, hace unos meses (casi un año) dejé mi condición de conductor malhablado e irascible ciudadano en busca del aparcamiento perdido.

Resultado: "Señores: ESTOY ENCANTADO!!"...

Llámenme modernillo pero he reducido mi transporte a un sistema multicombinado perfecto para cada situación: moto para desplazamientos cortos en ciudad, bici cuando me apetece relajar, transporte público (metro o bus), alquiler de coche para desplazamientos largos, taxi con chofer gratis y carsharing para área metropolitana.

Se acabó el sufrir y el gasto y la verdad es que, despues de dejar de fumar.. es mi mejor decisión..

Lo recomiendo a todo conductor nervioso que me lea!! cambia la vida.

Tambien soy conciente, que, para depende de que circunstancias, no vale.. la mía si... (veánse sillitas de niños y aventuras de m-30)