sábado, 4 de enero de 2014

Mis discos del año 2013

Como viene siendo habitual, aquí está la lista más esperada de los mejores discos del año:
1. Delantera Mítica, de Quique González:

Porque el maestro ha hecho un disco lleno de grandísimas canciones, porque el sonido de Nashville es excepcional, porque lo ha hecho sin una major que lo apoye, sin promoción,... y porque la versión que hace del Is your love in vain? de Bob Dylan es absolutamente desgarradora. Y porque además no hay nadie que cante los medios tiempos como él. Después de una dilatada carrera creo, sinceramente, que este disco lo posiciona como uno de los más grandes, si no el más grande.






2. Promesas de Tierra, de Javier Limón:

Decir el nombre de Javier Limón es ya sinónimo de exquisitez y de riesgo musical. En esta ocasión va un paso más allá y junta a jóvenes músicos de Oriente Próximo consiguiendo reencontrar las culturas sefardita, cristiana y andalusí, fundamento principal del flamenco y de la música andaluza.

No es un disco, es un viaje alucinante.



3. Hagar´s Song, de Charles Lloyd y Jason Moran: 

El disco gira entorno a la suite que le da nombre, una pieza de 30 minutos en la que se condensa todo el saber de Lloyd ahora que acaba de cumplir 75 años. Acompaña al viejo maestro en su eterna búsqueda de la belleza el pianista Jason Moran, logrando un entendimiento absoluto.
Tanto Lloyd como Moran alternan sus instrumentos con las flautas y el pandero.
Puro ECM. Puro Jazz. Pura música.




4. Modern Vampires of the City, de Vampire Weekend:

Con su tercer trabajo la banda de Nueva York literalmente se ha salido. Un discazo lleno de temas memorables como Diane YoungStep y Hanna Hunt.
Unas influencias africanas cada vez más latentes pero también más personales, estribillos redondos y sofisticados, y algo fundamental: estilo.



5. Mujeres, de Coque Malla:

Ya sé que se trata de un disco en directo, que no hay material nuevo, que son versiones, pero es que es un disco tan maravilloso...
Las colaboraciones con Leonor Watling, Anni B. Sweet, Jeanette, Ángela Molina,... son absolutamente deliciosas y tienen lo que tiene que tener una versión: el alma del que versiona. Y qué decir de la aparición majestuosa de la actriz y madre de Coque Malla, Amparo Valle. 
Un disco para escuchar una y otra vez.



6. Bach: Sonatas and Partitas,  de Chris Thile:

Cuanto más lo escucho más increíble me parece que pueda tocarse a Bach con una mandolina de esta manera. El estadounidense, músico de bluegrass, asume el riesgo y nos deja a todos boquiabiertos. Una auténtica revelación.





7. Val Miñor-Madrid: Historia y Cronología del Mundo, de Iván Ferreiro:

El músico gallego por fin parece estar feliz, y eso se nota.
Letras que inducen al amor y al optimismo, pero con una pizca de melancolía, que si no no sería nuestro Iván...







8. Chansons, de Jill Barber:

Otro de mis grandes descubrimientos de este año. Esta canadiense de 33 años ha hecho un disco de versiones de temas clásicos de artistas de Quebec y Francia como Édith Piaf, Serge Gainsbourg, Henri Salvador, Raymond Berthiaume y Raymond Lévesque en el que uno se querría quedar a vivir.





9. AM, de Arctic Monkeys:

En su quinto disco, los británicos se fueron a L.A. a grabar, y el resultado no es un disco, es una bestia parda.
Como dice la revista RS es perfecto para ese momento en el que te das cuenta de que el séptimo whatsapp que le has mandado, borracho, a tu ex, no era buena idea.





10. Without a Net, de Wayne Shorter Quartet:

Este disco es literalmente eso, un salto sin red. Absténganse pusilánimes y blandengues porque el maestro Shorter, pese a sus 80 años, te agarra y te destroza con un solo fraseo.








11. La Increíble Historia de un Hombre Bueno, de Depedro:

Tercer disco de Jairo Zavala, Depedro, grabado en Tucson (Arizona). Y a eso suena, a frontera, a desierto, a nomadismo. Colaboran músicos de tres continentes, entre ellos Joey Burns y John Convertino de Calexico.
En definitiva, un disco delicado, creativo y muy humano.






12. Ghost on Ghost, de Iron & Wine:

Quinto disco del californiano Samuel Beam, conocido como Iron and Wine.
Nunca le estaré lo suficientemente agradecido a Pablo Rivero por haberme descubierto a este señor.
Delicadísima mezcla de jazz, pop y R&B. Cautivador.




13. De un Mundo Raro, de Martirio y Raúl Rodriguez:

Nadie mejor que Martirio para homenajear a Chavela.
Y es que solamente desde el respeto absoluto se puede hacer un homenaje así y acabar poniendo tu alma en las canciones de la mítica llorona.
Acompañada de la guitarra de su hijo Raúl, Martirio no puede ya cantar mejor.




14. Sensación Térmica, de Kiko Veneno:

Y en esto llega José María López Sanfeliú, y recurre al productor Refree para buscar un nuevo sonido, más electrónico, más complejo, más rockero. ¿Y qué encontramos? Un paso hacia delante, una nueva búsqueda, pero el mismo Kiko de siempre.
Sirva como ejemplo Namasté, uno de los temas del año.






15. León Benavente, de León Benavente:

¿Que quienes son León Benavente? Pues un grupo que han formado Abraham Boba y Luis Rodríguez, ambos fieles escuderos en la trayectoria solista de Nacho Vegas, Edu Baos, miembro de Tachenko, y César Verdú, militante en los murcianos Schwarz.
Es su primer disco y les ha salido redondo: pop envenenado y crepuscular sobre el que destaca de entre todos los temas el que cierra el álbum, Ser Brigada,  y que posiblemente contenga el mejor riff del año. 




16. Trouble Will Find Me, de The National:

Grandísimo disco de grandísimas canciones de grandísimo pop de esta veterana banda de Brooklyn.
En palabras de la RS Matt Berninger gime sus ruegos románticos como un hombre que se ahoga en demasiado vino y la cantidad justa de Leonard Cohen.






17. Guadalupe Plata, de Guadalupe Plata:

No has escuchado nada parecido. Y por eso te van a gustar tanto.
El grupo de Úbeda sublima el sonido sucio y oxidado tan fronterizo del blues más primario, con momentos auténticamente lisérgicos llenos de guitarras que parecen perseguirte para hacerte morder el polvo.






18. Quercus, de June Tabor:

Disco este absolutamente inefable el que ha hecho la cantante británica de folk June Tabor para el sello ECM, junto a Huw Warren en el piano y al saxofonista Iain Ballamy.
Los temas son un compendio de poemas tradicionales británicos que June Tabor te canta al oído. Pero repito, con un resultado exquisito.



19. Grownass Man, de The Shouting Matches:

El ínclito Justin Vernon, después de desligarse de Bon Iver, funda The Shouting Matches y nos deslumbra con este trabajo repleto de rock y blues. No es fácil las primeras veces que se escucha, créanme. Pero cuando te entra no quieres parar de escucharlo.







20. Agujeros de Gusano, de Izal:

Con este disco los madrileños Izal se consagran definitivamente. Otro grupaco que consigue llegar sin la ayuda de nadie. Letras cuidadas, estilo y una voz, la de Mikel Izal, que te atrapa desde la primera escucha.





21. Dream River, de Bill Callahan

Bil Callahan se embarca en la ardua tarea de lustrar el concepto de Americana: el resultado es un disco de tempo reposado y suave.
Hay, incluso, quien se ha atrevido a decir que es el Astral Weeks de Callahan.
Para mí ha supuesto otro descubrimiento memorable.






22. De Palmas y Cacería, de Pony Bravo

Este tercer disco de los sevillanos los ha sacado por fin del underground.
El humor para denunciar la burricie, la estulticia y la injusticia.
Música de raíces, flamenco modernizado, electrónica, psicodelia y risas garantizadas.





23. The Weight of Your Love, de Editors

Sólo por la sobrecogedora voz de Tom Smith ya merece la pena escuchar este disco. Pero es que la banda de Birmingham es más que la voz de Tom Smith, pero es que cómo canta Tom Smith...






24. Only Many, de Ralph Alessi & Fred Hersch

El americano Fred Hersch acompaña con su piano, por el que siento auténtica devoción, a la trompeta del también americano Ralph Alessi. El resultado: un monumento de sensibilidad, musicalidad e improvisación jazzística.











25. The Verdi Album, de Jonas Kaufmann
      Richard Wagner : Airs d'opéras, de Jonas Kaufmann


En el año del bicentenario del nacimiento de Wagner y de Verdi no podía faltar un homenaje en esta lista. Y no se me ocurre ninguno mejor que el que les ha hecho el tenor alemán Jonas Kaufmann catapultándolo, de paso, al puesto de mejor tenor del mundo.















Y como propina, el año en que sentaron a Krahe en el banquillo por un video hecho hace 30 años en el que explicaba cómo cocinar un cristo, el año en que quedó patente cómo de absurda es a veces la religión cuando cree sentirse ofendida, el año en que los curas volvieron a escribir leyes,... el maestro escribe esta canción que se titula Fuera de la Grey.

martes, 16 de abril de 2013

Hay que encender la luz


4:00 AM
De crío, pensaba que para espantar a los monstruos que habitaban la noche había que dejar la luz encendida. No bastaba con encenderla un momento, porque los monstruos no vivían en un país lejano al que huyeran cuando veían luz, si no que se escondían en los recovecos de las casas, al fondo del armario trastero, en el tubo de la campana extractora o en el  falso techo. Habitando allí, en cuanto vieran que la luz se volvía a apagar, no tardarían nada en aparecer de nuevo, no tenían que viajar desde un oscuro y lejano reino.  La única manera de salvarse de los monstruos era estar en la cama o con la luz encendida.
         Se le vino esto a la memoria mientras aguantándose las arcadas, se limpiaba de la planta del pie los restos de una obscenamente grande cucaracha que había pisado a oscuras cuando se había levantado al baño. Qué asco le daban esos bichos.
        Cuando terminó, apagó la luz, salió del baño y se encaminó hacia la cocina; tenía que pasar por ella para ir al cuarto dónde guardaba la fregona para limpiar los restos aplastados del bicho que habían quedado en el suelo. Iba a encender la bombilla del pasillo cuando un estúpido orgullo se lo impidió. “Si la enciendo ahora, no va a ser por miedo a pisar otra cucaracha, va a ser porque me he acordado de los miedos que tenía de pequeño, y joder, soy un hombre ya, no un crío chico que mira a oscuras un abrigo colgado de un perchero y ve un ogro. Ya enciendo la de la cocina, que me hace falta para sacar los aperos de limpiar”.
         Ya estaba en la cocina, ya levantaba la mano hacia el interruptor cuando algo que parecía una mano fría le tocó la pierna, justo por encima del tobillo. No fue un contacto fuerte ni prolongado, pero el susto le hizo pegar un respingo, perdió el paso, se dio en el dedo pequeño del pie con el quicio de la puerta y cayó hacia atrás dándose en el cuello con la barra americana de silestone y cayó al suelo. Todo se apagó.
        Cuando abrió los ojos, vio en el reloj digital de la cocina que eran las 4 y cuarto. No ha sido para tanto, pensó. Intentó levantarse. Al principio, sólo con sorpresa, notó que no podía. “Se me habrá dormido una pierna”. Volvió a intentarlo, y entonces se asustó. No se podía mover. Gimió. Volvió a gemir, y notó como los ojos se le llenaban de lágrimas.
        Y oyó entonces un susurro de cómo hojas que se mueven con el viento, pero más leve. Notó en su pecho una la misma mano fría que antes, y luego, unas cuantas patas, luego decenas, luego cientos. Y con el rabillo del ojo, una sombra que medio se ocultaba tras la barra americana y decenas de cucarachas que correteaban por sus piernas y por su pecho y que se acercaban a su cuello. Sintió pánico, un pánico como mil agujas al rojo vivo que no pararan de moverse en su cabeza. Gritó, un grito gutural, inarticulado y todo se apagó.

9:00 AM
-           - ¿Cómo le habéis encontrado?
-        -  Un vecino oyó un golpe, ya sabes estas paredes son de papel. Y poco después, un grito enorme. Es un viejecillo, de unos ochenta, de estos que no duermen y pasan la noche en la cama oyendo la radio. Nos llamó y así nos lo hemos encontrado.
-           - ¿Desnucado? La causa de la muerte, quiero decir.
-         -  Pensé al principio que sí, aunque la cara de espanto que tiene me hacía dudar,  y al final la duda era de las buenas. El forense ha dicho que el golpe en la columna lo dejó tetrapléjico casi seguro, pero que la muerte se debió a una parada del corazón. Tiene que hacer análisis y tal, pero cree que sufrió un shock que le produjo una parada cardíaca, seguramente debido al pánico. Sin señales de lucha, ni de otras pesonas. Parece sólo mala suerte. Nada más anormal, salvo algunos restos de insectos, se ve que debe tener alguna plaga.
-          - Joder. La verdad es que tiene que acojonar, ver que no te puedes mover, de noche y todo oscuro, pero como para llegar a morirse… No sé, cada uno es como es. ¿Has desayunado?
-          -  Como se nota que llevas 20 años con esto. Yo tengo el estómago cerrado, paso
Salieron de la casa mientras hablaban del papeleo que iban a tener que hacer, de cómo contactar con la familia y el resto de las rutinas a cumplir.
       Mientras tanto, en su escondite detrás del mueble que había debajo del fregadero, el duende que los había escuchado, sonreía mientras acariciaba a una de sus cucarachas.

jueves, 3 de enero de 2013

Mis discos del año 2012

Como viene siendo habitual en los últimos años, aquí está mi lista de los mejores discos del año:

1. Feeling good,  Joan Chamorro y Andrea Motis (Temps Record).
El profesor de la Escola Municipal de Música de Sant Andreu, Joan Chamorro al frente de la Sant Andreu Jazz Band y con la increíble voz de Andrea Motis.
"Una sonrisa es un modo económico de mejorar tu aspecto. Feeling good no pretende ser más que eso, una sonrisa, una caricia, un gesto,... que no es mucho pero tampoco es poco."
Así describe Joan Chamorro su disco. Y no se me ocurre una manera mejor de hacerlo.
Y qué decir de Andrea Motis, que con solo 18 años es capaz de cantar como canta. Inmenso descubrimiento.

 2. Huellas, Jorge Pardo (Autoeditado).
No se puede entender el flamenco-jazz sin la figura del flautista y saxofonista Jorge Pardo, ni ahora, ni en su origen. Y aquí firma un auténtico testamento musical, un sumario de lo que significa su obra, su concepto de la música, con 18 composiciones propias.
Además, en la grabación del disco ha intervenido gente de la talla de  Jeff Ballard, Tomatito, David Pastor, Niño Josele, Javier Colina, Antonio Serrano, Jerry Gonzalez, Josemi Carmona, Tino di Geraldo, Carles Benavent, Paquete, ...Todo un lujo. Una obra imprescindible para comprender qué es eso de la fusión.

 
3. Tempest, Bob Dylan (Columbia Records)
Llega el señor Zimmerman y nos sorprende con un disco impresionante, sin piloto automático, con una voz que suena como si estuviera haciendo gárgaras con sulfúrico y escupiendo fuego, y, lo más importante de todo, con temazos increíbles, algunos de más de 7 minutos, versos brillantísimos y mucha, mucha cera. 
In Bob we trust. For Ever.
Por cierto, Bob, listen to me, la portada del disco te ha quedado horrorosa. ¿En qué coño pensabas?


4. Lonerism, Tame Impala (Modular Recordings)
Escribe Xavi Sancho en El País: "Lonerism no es más que otro ejercicio de psicodelia de manual, un estudio sobre cómo hubiera sido el mundo en los 70 si los Beatles en vez de separarse hubiesen cambiado de proveedor. [...] Los hipsters le adoran, y a los que siempre nos ha interesado la psicodelia tanto como la cría de moluscos en Mar Jónico, nos tiene fascinados."
Efectivamente, me tiene fascinado este grupo autraliano, obsesivamnete, diría yo, con canciones como Why won’t they talk to me, Elephant o la maravilla lennoniana que es Feels like we only go backwards.

5. Homenaje a Enrique Morente, Los Evangelistas (Sony Music Entertainment España)
El título del disco no deja lugar a dudas: Un homenaje en toda regla a uno de los músicos más importantes que ha dado España en el s. XX. ¿Y quiénes son Los Evangelistas? Pues J y Floren de Los Planetas, Antonio Arias de Lagartija Nick y Eric Jiménez que pertenece a ambos.
Disco en la línea del fundacional y testamental Omega, con versiones del repertorio morentiano, pero con el personalísimo toque de sus autores.
El disco nos descubre, además, la preciosa voz de Soleá Morente en dos de sus cortes: Yo, poeta decadente, y La estrella. Un lujazo.

6. Sleeper, Jarret, Garbareck, Danielsson y Christensen (ECM)
La pregunta es: ¿Cómo diablos ha permanecido este disco oculto en los archivos de ECM desde que se grabara en directo en 1979?
Manfred Eicher tendrá sus motivos. El caso es que ha visto la luz, y por favor, ¡qué grabación, qué lujo, qué músicos!
El disco rescata el célebre cuarteto europeo de Jarret, hoy casi olvidado, con un entusiasmo y un brío difíciles de encontrar en sus discos de estudio.
Aviso a navegantes: este no es jazz para escuchar mientras se cena con los amigos en casa. Es jazz para escuchar con mucho volumen, con un nudo en el estómago y acabar de rodillas dando las gracias.

7. Life is peopple, Bill Fay (Dead Oceans)
Joshua Henry, de 32 años, el empresario tras la discográfica Dead Oceans, creció escuchando las copias en vinilo de su padre de los viejos discos de Fay, y se impuso el objetivo de llevar de nuevo a los estudios, alejado desde 1971, a este J.D. Salinger de la música.
El resultado: Belleza. La vida es la gente y hay que celebrar la vida.
A destacar el tema This world que comparte con Jeff Tweedy y la versión que hace del Jesus, etc.. de Wilco.
Un apunte: Todos los beneficios del disco van destinados a MSF, condición que exigió Bill Fay para entrar en el estudio.

8. Wrecking ball, Bruce Springsteen (Bruce Springsteen)
El Boss ha vuelto, y de qué manera. 
Es elogioso, de forma incontestable, cómo este señor, millonario, mito, por nadie discutido y sexagenario, siga explorando y tratando de ir más allá, y al igual que Dylan, nos obsequie con un disco nada automático, sino más bien arriesgado, inconformista, fuera de molde y hasta enfadado.
De elogiar y de inclinarse ante él.
Y en mi retina quedará ese concierto del Bernabéu de 3 horas y 50 minutos en el que cada tema parecía como si fuese la última canción que un hombre iba a tocar sobre la faz de la tierra.

9. Sunrise, Masabumi Kikuchi Trio (con Paul Motian) (ECM)
Es difícil entrar en el universo del pianista japonés Masabumi Kikuchi, pero una vez que traspasas esa frontera ya te quieres quedar ahí para siempre.
Jazz complejo, cerebral, sin notas de más, sin notas de menos, donde por momentos tienes la sensación de asistir a un diálogo zen entre Kikuchi y Motian. Un disco de una belleza casi ensoñadora.
Sirva también de testimonio de los últimos baquetazos que dejó grabados Paul Motian (para mí, el mejor baterista de la historia del jazz).


 
10. Old ideas, Leonard Cohen (Sony Music Entertainment)
 Otro peso pesado que viene a rescatarnos del tedio y de la catástrofe.
El candiense ya apenas canta, pero su susurro cavernoso te sigue llegando a lo más hondo.
Hay gente que no debería retirarse nunca.
Destacar, la meritoria traducción que hizo Sabina de las letras del disco y que regalan en la edición española.



 
11. Solo guitarra, José Luis Montón (ECM)
Manfred Eicher escuchó las interpretaciones sensibles y creativas de José Luis Montón acompañando a la cantante Amina Alaoui en su proyecto Arco Iris y ahí concibió un espacio para el guitarrista barcelonés en su sello.
Como su nombre indica, se trata de un disco de guitarra desnuda y eminentemente flamenco, pero con reminiscencias barrocas e incluso un rendido homenaje a Bach.
Virtuosismo mayúsculo, pero al servicio de la música, y solo por la música. ¡Y cómo suena una guitarra española grabada por Eicher!



12. Come sunday, Charlie Haden y Hank Jones (Universal Music International)
No existe en el mundo un bajista con la sensibilidad y el gusto de Haden al igual que tampoco existe en el mundo un pianista que se aproximara al recorrido y la luminosidad de Jones, tristemente fallecido tres meses después de la grabación del disco.
Música por la música, nacida de la sencillez, hecha por dos tipos que saben de esto.




 
13. Birds fly south, The Mastersons (New West Records)
Sin duda, el disco debut del año. Este dúo de Texas, formado por Eleanor Withmore y Chris Masterson, hacen un rock-folk fantástico, con melodías de esas que te ponen de buen humor, con juegos corales brillantes y un sonido impecable. Un disco para levantar ánimos, vaya.





14. Nosotras somos, Las Migas (Chesapik)
Después de que Silvia Pérez Cruz abandonara el grupo y fuera sustiuida por Alba Carmona, el grupo catalán vuelve con toda una declaración de intenciones en el título de su segundo trabajo: Nosotras somos.
Con Alba su flamenco se ha vuelto más canalla. Y por supuesto, siguen siendo Las Migas.




15. Born to sing: no plan B, Van Morrison (Blue Note Records)
Trigésimo quinto álbum de estudio del león de Belfast y un nuevo regalo para los oídos.
Canciones bellas, contenidas, excelsamente grabadas, y la voz, (esto sí que es La Voz) del gran Van the Man. Y es que no puede negar que nació para cantar.
Le perdonamos su mala leche e incluso su intento de canción protesta de In money we trust y agradecemos profusamente que no haya un plan B.
 


16. Adam´s lament, Arvo Pärt (ECM)
No se puede entender la música sacra contemporánea sin la figura del compositor estonio Arvo Pärt.
Adam’s Lament describe el dolor y la pena que Adán siente por la pérdida del favor de Dios y del paraíso. Para ello, Pärt se ha basado en los textos de San Silouan El Atonita.
Dirige el director estonio Tonu Kaljuste y además de su carácter religioso, la obra está concebida como una llamada a la (re)conciliación entre Occidente y Oriente, al diálogo entre los dos mundos politico-culturales. No en vano es un encargo de las capitales culturales europeas de 2010 (Estambul) y 2011 (Tallin).
 
 

17. Break it yourself, Andrew Bird (Bella Unión)
Otro de mis grandes descubrimientos de este año, el cantante, violinista y silbador (como a él le gusta definirse) Andrew Bird, firma un disco que es pura felicidad, pura luminosidad.
Es imposible no dejarse llevar por temas como Danse Carribe, Give it away o Eyeoneye. Canciones de esas que dan sentido a la vida.






 
18. Cosas de dos, Mayte Martín (Mayte Martín)
¿Quién dijo que el bolero estaba muerto? Aquí llega la gran Mayte Martín para desmentirlo y dejarnos 14 bolerazos, grabados en la sala Luz de Gas de Barcelona en riguroso directo, llenos de sabiduría, sensibilidad y sentimiento. Y todo ello sin gritar, oiga.
El disco además surge como un experimento de crowdfunding donde cada uno aportó su granito de arena en forma de mecenazgo, con la recompensa de ver tu nombre impreso en el libreto interior. Evidentemente un servidor no se pudo resistir.



19. Santacruz, Supersubmarina (Sony Music Entertainment)
Los de Baeza (Jaén) entregan su segundo trabajo y, como siempre, cuando llegan a más gente, los indies dicen que si se han vendido, que si se han vuelto comerciales, que si sonaban mejor antes, ... ¿os suena?
El caso es que el disco tiene buenas canciones como Canción de guerra, Tecnicolor, El baile de los muertos, Para dormir cuando no estés,...
Ideal para ponerlo en el coche a todo volumen y hacer kilómetros cantando.



20. Artesano, Miguel Poveda(Universal Music Spain)
Le recriminaron los antiguos que a su voz le faltaba noche, arena,... así que se fue a vivir a Sevilla en busca de noche y de años para su garganta. ¡Y vaya si lo ha conseguido!
En este trabajo suena más viejo, con mucha más arena en la voz y sigue demostrando un conocimiento de todos los palos y un talento que no se sabe bien dónde tendrán su fin.
Está claro que se ha erigido en la figura crucial del flamenco del s. XXI.




Y como colofón a esta lista, no me quiero olvidar de uno de los grandes temas del año y un video absolutamente brillante:
¿Qué fue de los cantautores? del maestro Luis Pastor. Aquí os lo dejo:


domingo, 29 de enero de 2012

Finlandia y España. Algunos datos comparativos. Propuesta para el debate.

Finlandia,
baja densidad poblacional, unos 5 millones de habitantes.
lengua minoritaria no indoeuropea, no útil como medio de comunicación con otros países.
Inmensas extensiones del país vacías
Fríos extremos de hasta -30C
Nieve, mucha nieve y frío.
Hasta el primer tercio del s.XX era un país bastante pobre.
No hay crisis y es un país considerado como uno de los ejemplos a seguir desde muchos puntos de vista: economía, educación, tecnología.
Por los aeropuertos pasan pasajeros de cualquier rincón del mundo haciendo escala o para hacer turismo en el país.
Rovaniemi, mundialmente conocido, está en el culo del mundo, en un lugar inhóspito, con apenas 100 mil habitantes, sin tradición culinaria, fríos extremos.
Residentes: finlandeses, suecos y también rusos.

España,
Aproximadamente 47 millones de habitantes.
Lengua hablada por casi 500 millones.
País más o menos bien comunicado y con concentraciones poblacionales en urbes, sobre todo en la costa y ciudades como Madrid, Granada, Zaragoza, etc.
Clima muy variado que otorga gran riqueza al país: turismo, agricultura...
Hace 500 años, sin entrar en ningún tipo de juicios, España descubrió América.
España tiene un mercado potencial inmenso: todo el continente americano, el Magreb y África occidental y Europa.
España tiene aeropuertos vacíos y con una actividad ridícula.
Almería, noviembre de 2011, 20 grados. Un pueblo como Roquetas de Mar lleno de hoteles y bares totalmente vacío.
Residentes: españoles que se enfrentan entre ellos, que roban, que mienten, que votan a partidos corruptos, demagogos y delincuentes (PP, PSOE, CiU, ERC...)y cuya política es gastar toda la energía, tiempo, trabajo y dinero posibles en la autodestrucción del país.





Rovaniemi, centro de Finlandia

sábado, 7 de enero de 2012

Mis discos del año 2011

Ya están todas hechas, todas comentadas y todas olvidadas, pero, como viene siendo habitual, faltaba la mía. Aquí la tenéis:

1. Su nombre era el de todas las mujeres, Loquillo canta a Luis Alberto de Cuenca (Warner Music Spain)

Vuelve José María Sanz, Loquillo, cantando una selección de poemas de Luis Alberto de Cuenca y crea un disco único, salvaje, y como reza el primer corte del disco, políticamente incorrecto
Loquillo ya no necesita demostrar nada y ahora sólo parece dedicarse a hacer aquello con lo que se siente cómodo, eso sí, sin renunciar nunca a su mítica actitud Rock&Roll. Y eso es lo que hace este disco tan grande.



2. Live at Birdland, Lee Konitz, Brad Mehldau, Charlie Haden & Paul Motian (ECM)

Tres genios abosutos,  como son el saxo alto Lee Konitz (82 años), el baterista Paul Motian (78 años) y el contrabajista Charlie Haden (72 años) junto con la presencia del "joven" pianista Brad Mehldau (39 años), uno de los pianistas más respetados del momento.
Todo ello grabado por Manfred Eicher en directo en el Birdland de Nueva York.
Jazz íntimo, sugerente, tocado con delicadeza, buscando la pureza y yendo a lo esencial de cada tema y de cada nota. 
Sirva también como homenaje de despedida a Paul Motian, maestro de bateristas, fallecido este año.


3. Rio, Keith Jarret (ECM)

Keith Jarret se sienta a un piano en un una sala de conciertos en una ciudad del mundo y hace un ejercicio de improvisación. El concierto lo graba Manfred Eicher. ¿Hay que explicar más?


4. La joven Dolores, Christina Rosenvinge (Warner Music Spain)

Vuelve la Rosenvinge con su trabajo más delicado, adulto y reflexivo. Melodías llenas de luz, letras íntimas y cuidadas y hasta un tema de ruptura absolutamente demoledor, como es weekend.
Christina en su mejor momento.








5. Río negro, Juan Perro (La huella sonora)

Santiago Auserón, a lo suyo. Su música, rock latino mestizo, sigue sonando en este disco igual de bien, igual de libre, igual de Juan Perro, porque este hombre, y lo podemos decir ya, no vende música, vende estilo.






6. Mapas, Vetusta Morla  (Pequeño salto mortal)

¿El hecho de que un grupo sea escuchado por muchos ha de restarle calidad? Prejuicios. 
El segundo disco de Vetusta es un discazo, y sale victorioso del combate que supone un segundo disco: la vida o la muerte.
Solo le pongo un pero: el sonido no es el que debería tener un disco de este nivel.





7. Mirror, Charles Lloyd quartet (ECM)

Continúa Charles Lloyd su viaje en busca de la ternura, retomando en este disco su idilio con el repertorio latinoamericano iniciado en 2002 con Rabo de Nube. La versión que ofrece el saxofonista de La Llorona resulta conmovedora.
Y conmevedor resulta también que este señor nacido en 1938 siga buscando dónde él busca y haciendo sonar el saxo como sólo él sabe hacerlo.

 
8. Confesiones de un artista de mierda, Iván Ferreiro (Waner Music Spain)

Ya sé que no es muy elegante colocar un disco recopilatorio en una lista de discos del año, pero las canciones de este disco, aunque viejas, suenan renovadas en este directo que se ha inventado Iván Ferreiro, que cada vez canta mejor.





9. Presidente, Sr. Chinarro (Mushroom Pillow)

Es este un disco emocionante, divertido, con muchos versos inspiradísimos marca de la casa. Como muestra, Babieca y Una llamada a la acción, auténticas obras maestras.








10. The whole love, Wilco (dBpm Records)

Ya sé que, de largo, no es el mejor disco de Wilco, pero es un disco de Wilco y por eso he de ponerlo en la lista, aunque solo sea por el impresionante tema dylaniano de 12 minutos que cierra el disco, (One Sunday morning).







11. Alone at the Vanguard, Fred Hersch (Transdreamer dba Palmetto)

Este pianista, enfermo de sida desde hace décadas y que en el 2008 estuvo en coma y al borde de la muerte, nos ha dejado este año uno de los trabajos de piano solo más impresionantes de los últimos años.
Como ocurre con la prosa de Javier Marías, el piano de Hersch acaricia al oyente, le somete a una auténtica experiencia musical, no a un simple recital de piano. 
A Bill Evans le habría encantado.




12. Helplessness blues, Fleet Foxes (Bella Union)

Este trabajo de Fleet Foxes también sale algo más que airoso del dificilísimo segundo disco. Si te gusta el folk, las armonías vocales, la instrumentación exuberante y la voz íntima y arrebatada, no lo dudes, los de Seattle son tu banda.








13. Remembranzas, Carmen Linares (Salobre)

Homenaje a la gran Carmen Linares, grabado en directo en el Teatro de la Maestranza de Sevilla.
Este disco es el testimonio de más de cuarenta años de carrera profesional, de compromiso, de pasión y aprendizaje del cante flamenco.
Si escuchas los dos cantes que interpreta con Miguel Poveda y no se te encoge el estómago, entonces es que definitivamente el flamenco no es tu música.




14. En la imaginación, Silvia Pérez Cruz & Javier Colina Trío (Produccins Contrabaix)

Silvia Pérez (la voz de Las Migas) canta deliciosamente bien sobre el contrabajo del maestro Javier Colina, la batería de Marc Miralta, el piano de Albert Sanz y el saxo de Perico Sambeat.
Se trata de una revisión de clásicos de la música cubana, seleccionados y arreglados por el contrabajista navarro. Una auténtica delicia, que uno sigue sin explicarse como ha pasado tan desapercibido.




15. A night at the Village Vanguard & Excelsior, Bill Carrothers (Pirouet Records / Outthere France)

Y por último un gran descubrimiento de este año, el pianista Bill Carrothers, uno de los secretos mejor guardados del jazz americano. Me he permitido traer los dos discos que ha publicado en este pasado 2011:
A Night At The Village Vanguard es una excelente ocasión para disfrutar de su música en formato de trío. Música peculiar, sin obviedades. Y es que Carrothers, en todo momento, se lanza por barrancos extraños y difíciles, no siempre para alcanzar un resultado mejor pero buscándolo siempre.




En Excelsior ha entrado en un estudio sin tener un esbozo de lo que iba a grabar por primera vez en su carrera. El resultado es espontáneo, muy inspirado, y unos de los discos a piano solo más reflexivos que haya escuchado.






Y como siempre, ni están todos los que son ni son todos los que están ni el orden de los factores altera el producto.