Un poco de polémica para el blog

No voy a descender hasta las antiguas culturas mediterráneas, la mitología taurina, o las primeras representaciones taurinas hispánicas (que no españolas), ya que no pretendo defender la fiesta de los toros como una tradición. Ni siquiera, me voy a basar en que el toro bravo sólo vive hoy en día dónde se cría para lidiarlo posteriormente. No quiero defender el toreo como un arte, ya que desde mi posición de aficionado entiendo perfectamente a los detractores de estos festejos, porque yo también soy amante de los animales, especialmente del toro. Comprendo que dónde yo puedo ver un arte, otros puedan ver una carnicería. Sin embargo, lo acaecido en Cataluña, me llama la atención sobremanera por varios asuntos. En primer lugar, se asegura repetidamente, que no se vota en contra de los toros porque estos sean uno de los iconos de España en el extranjero, pero por otro lado se hace hincapié en que no pretenden prohibir el toro bous, tan celebrado en muchos pueblos catalanes. Se pretende por lo tanto obtener de esto rédito político sin coste alguno. Los toros son, por otro lado, de cultura tan catalana como del resto de España quieran los independentistas catalanes o no. Igualmente, si lo que se pretende hacer desaparecer es el sufrimiento del animal, que no la “fiesta nacional de España”, habrá que hacer desaparecer mediante la misma ley, todo tipo de sufrimiento animal. Por ejemplo, ¿es mas digna y menos dolorosa la muerte de una langosta que echan viva en una olla con agua hirviendo?, ¿acaso no sufren los caracoles tras tenerlos metidos en harina durante todo un día, y luego depositarlos en agua a 100º hasta que mueren?,¿es menor el sufrimiento de una oca, a la que se le coloca una anilla en el esófago y la alimentan hasta enfermar, para lograr una rico paté de hígado?, ¿deberían de prohibir las matanzas, donde se apuñala a un cerdo en el cuello y se le deja desangrar para poder recoger la sangre para la futura morcilla?, y algo aún mas sencillo y numeroso, ¿es más digna la vida de un pájaro enjaulado hasta que muere? Imagino yo que estos representantes políticos no probarán estas navidades la langosta, ni el paté ni tendrán colorines en casa.
Si no van a incluir la eliminación de todo sufrimiento de animales, deberían dejar aparcada la doble vara de medir, la doble moral, y dejar que la gente elija en libertad si asistir o no a la plaza, sin tanta prohibición y sin tener que viajar a Perpignan.
Creo, de todos modos, que los toros acabarán con los toros. Cada vez hay menos arte, menos emoción, menos vergüenza torera, hay menos bravura en los toros, menos afición en los tendidos, menos conocimiento en los palcos, y más bronce en los bolsillos de los empresarios. Por todo ello creo que los toros tienen fecha de caducidad, y que pasarán a ser un espectáculo para recordar una cultura anterior.