martes, 31 de julio de 2007

Dos ojos: una mirada.

Dicen que la vida no está interconectada. Que no existen las coincidencias.

Es por ello que, aunque con un cierto retraso, guardamos homenaje en esta, nuestra barra, a la "extraña" coincidencia de dos genios que nos dejan: Bergman y Antonioni.


Sin hacer ruido y con la casualidad de lo dramático, se nos han ido dos de los maestros del cine más importantes de nuestro Siglo.

Antonioni y su neorrealismo lleno de calidez y la crudeza de lo cotidiano y Bergman, el sabio de la lentitud y el momento reflexionado. Personajes arquetípicos de uno y polisémicos del otro. Dos maneras de mirar la realidad de una manera absolutamente magistral.
Sin duda si fueran toreros, Antonioni sería Luís F. Espla y Bergman, José Tomas.
Por mi parte, a mi, Muchas veces me gusta comparar mi vida como una historia de Bergman y sus personajes: Deliberadamente complejos y reflexivos. A veces, también, me conformo con redimir mis deseos al estilo Antonioni, sencillos y con el romanticismo de blanco y negro italiano.


Se nos han ido, pero como se suele decir en estos caso, mientras queden sus películas en nuestra estanteria, allí estarán ellos.

1 comentario:

Miguel Ángel dijo...

¿Antonioni Luis Francisco Esplá? Más bien sería Fran Rivera, un tío con mucho cartel, tradición, pero que al final acaba aburriendo a las ovejas. ¿O me vais a decir que os gustó Blow-up?
En lo de Bergman ninguna objeción. Yo, sin ser bergmaniano, me gustan bastante Fresas salvajes, Secretos de un matrimonio y El séptimo sello. Me parecen grandes películas. Pero tengo que estudiarlo más.